Cosas muy extrañas suceden en el mundo. Gente armada decide matar gente por el gusto de hacerlo. Otros apoyan guerras desde la comodidad de sus casas, y otros tantos defienden los derechos de un estado caotico. Este es el caso del Peru, mi pais, bellisimo pedazo de territorio encerrado en bordes imaginarios. El gobierno, el mismo que es incapaz de controlar la tremenda corrupcion de sus empleados, y que no puede ni siquiera comprar patrulleros sin que los escandolos aparezcan, y que dicho sea de paso es dueño de casi todo el territorio peruano, ha decidido por fin entregar en consecion algunos sitios arqueologicos, para que la empresa privada invierta y genere trabajo. Una excellente idea, tenemos muchos sitios arqueologicos que se estan deteriorando, destruyendo por por los elementos y por los mismos peruanos en la mayoria de los casos. Por otro lado, los peruanos tendremos la oportunidad de recobrar nuestro patrimonio, rescatarlo de las manos del estado que nos los expropio salvajemente. Esta nueva ley esta volviendo todo a como fue antes, cuando los peruanos podiamos decir, esto es mio, mi padre me lo heredo y a el su padre, y aqui vivieron nuestros antepasados, los Chiribayas. Es que el gobierno, por un capricho, decidio un dia que todos los lugares con restos arqueologicos le pertenecian, asi de simple, lo decidieron y nadie pudo decir nada porque era el santo gobierno, brutal y abusivo.
Mas sorprendente aun, algunos personas, politicos por supuesto se oponen a que la empresa privada preserve y genere trabajo, con la consecion de los sitios arqueologicos. Son los clasicos antitodo, los perros del hortelano que no comen ni dejan comer, y los viejos slogans y frases regresan; "Abajo el patron abusivo" "abajo la empresa privada" y cuando terminan regresan a sus casas a quejarse mas porque trabajo no hay.
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